Nuestro viaje en la fabricación de máscaras

¿Qué haces cuando tienes que fabricar millones de máscaras rápidamente para mantener seguros a tus empleados, pero no tienes la experiencia ni el equipo para hacerlo? Es más: ¿cómo se puede hacer esto sin afectar el suministro de mascarillas que necesitan los trabajadores sanitarios de primera línea?

Ahora que las infecciones están aumentando nuevamente en muchas partes del mundo, ahora analizo los desafíos que enfrentamos en febrero, cuando la pandemia se aceleró a nivel mundial.

Nuestra tarea era desalentadora, pero sabíamos que podíamos tener éxito si cumplíamos las tres dimensiones que han sido la base de nuestro negocio: excelencia operativa, una cadena de suministro fuerte y resiliente, y nuestros valores corporativos. 

Excelencia operativa en acción

Con aproximadamente 160.000 empleados en 30 países y un comercio cada vez más restringido, especialmente para equipos de protección personal, sabíamos que este esfuerzo requería un modelo de fabricación distribuido en Asia, América y Europa. Necesitábamos movilizar la fabricación en 10 países para reducir los riesgos de escasez de suministro. Según nuestros cálculos, necesitábamos al menos un millón de máscaras por semana para los trabajadores de nuestra fábrica para ayudarlos a mantenerse seguros. 

El primer paso crítico fue asegurar las máquinas para fabricar mascarillas y llevarlas a los 10 lugares en un momento en que las rutas de carga convencionales eran limitadas. Como este esfuerzo no era tan simple como simplemente buscar un horario de vuelo o tren, recurrimos a nuestro equipo de operaciones para idear una solución alternativa.

Para identificar la solución adecuada para llevar las máquinas de fabricación de mascarillas a los diferentes sitios, el equipo consideró todas las opciones logísticas disponibles desde la primera hasta la última milla, abarcando aire, mar y tierra. Sumándose a esta complejidad, necesitábamos abarcar la infinidad de directrices y restricciones de exportación e importación. Al final, resolvimos el rompecabezas logístico gracias a un esfuerzo de equipo bien coreografiado entre operaciones, asuntos legales y gubernamentales.

Construyendo una cadena de suministro regional

En un esfuerzo paralelo, el equipo de la cadena de suministro recorrió el laberinto de adquisiciones para garantizar que obtuviéramos los materiales adecuados de alta calidad en las regiones adecuadas sin afectar el suministro de materiales necesarios para fabricar las máscaras que protegen a los trabajadores sanitarios de primera línea. También necesitábamos abordar otros desafíos complejos. ¿Cuál es la forma más rápida de asegurar los materiales? ¿Cómo nos aseguramos de que los materiales cumplan con nuestros estándares y requisitos? ¿Cuál es el enfoque correcto para apoyar una cadena de suministro regionalizada?

Al final, el equipo optó por un enfoque por fases que implicaba asegurar los materiales de tres regiones diferentes de la forma más rápida y con menor riesgo. La mejor solución fue suministrar el material para la fabricación de mascarillas a todos los sitios fuera de China en la primera fase. Una vez que se asegurara el suministro inicial, el equipo pasaría a la fase dos y trabajaría con proveedores regionales para salvaguardar el suministro futuro.

Conseguir compromisos de estos proveedores regionales requirió agilidad y pensamiento creativo porque los materiales de los proveedores tradicionales eran escasos. El proveedor de materiales para América es un ejemplo perfecto de este enfoque. Dado que una buena filtración es un requisito clave para los materiales de las mascarillas, Flex cerró el trato con Cummins, un líder mundial en energía. Puede que al principio no parezca una elección lógica, pero ¿recuerdas lo que dije sobre la agilidad y el pensamiento creativo? Negocio de filtración de Cummins tiene más de seis décadas de experiencia en la fabricación de materiales y sistemas de filtración para motores diésel, transmisiones y aplicaciones industriales.

Viviendo los valores Flex

Nuestra misión de fabricación de mascarillas debe su éxito en gran parte al vínculo entre los empleados de Flex que está sellado por un conjunto de valores compartidos. Nos unen tres valores fundamentales: apoyarnos mutuamente mientras nos esforzamos por encontrar una mejor manera; moverse rápido con disciplina y propósito; hacer lo correcto siempre.

Estos valores facilitaron el éxito de nuestra iniciativa de fabricación de mascarillas. Nuestros equipos tenían el propósito claro de mantener seguros a nuestros compañeros de trabajo y hacerlo rápidamente. El sol nunca se puso para este equipo global mientras trabajaban las 24 horas del día asegurando suministros, coordinando la logística y compartiendo ideas y aprendizajes. Como resultado, pasamos de nunca haber fabricado una sola mascarilla a producir 30 millones de mascarillas en sólo 22 semanas. Nuestro exitoso esfuerzo nos ha impulsado a mirar más allá de nuestras propias necesidades de mascarillas. Debido a que el equipo se ha desempeñado casi sin fallas, hemos comenzado a donar el exceso de suministro a nuestros empleados, organizaciones benéficas locales y trabajadores de atención médica de primera línea.

Estoy muy orgulloso de cómo el equipo Flex se unió para resolver este desafío. Es el último ejemplo destacado de lo que se puede lograr cuando se combinan los elementos tangibles, la excelencia operativa y una cadena de suministro sólida con los elementos intangibles de los valores corporativos compartidos. Felicitaciones al equipo de Flex por un trabajo bien hecho.

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