El panorama sanitario mundial actual está experimentando una rápida evolución, impulsada en gran parte por el envejecimiento de la población y la demanda de tratamientos mínimamente invasivos que simplifiquen y mejoren la experiencia de atención al paciente. En respuesta, el mercado de la óptica médica se ha convertido en una fuerza fundamental en lo que respecta a la transformación de la prestación de atención sanitaria. Las cifras lo confirman, ya que Precedence Research informa que el mercado de la óptica ha superado los $200 mil millones de dólares en 2022 y que la demanda futura no hace más que crecer.
En dispositivos médicos, la óptica puede combinar imágenes, aplicación de láser médico u otros conjuntos fotónicos. Los ejemplos incluyen productos de diagnóstico miniaturizados para aplicaciones de uso doméstico, diagnósticos in vitro (IVD) para uso hospitalario y clínico, dispositivos de punto de atención, escáneres, dispositivos oftálmicos, así como aplicaciones endoscópicas y quirúrgicas.
Dar prioridad a los avances en las soluciones ópticas puede tener un impacto positivo tanto en la atención al paciente como en la diferenciación de productos de una empresa. Aprovechar los avances ópticos permite a las empresas de atención médica acelerar el tiempo de comercialización, reducir los costos de desarrollo de productos y aumentar la precisión y la calidad.
Estas oportunidades de mercado están llevando a las empresas de productos médicos a buscar experiencia en el ámbito de la óptica y capacidades de extremo a extremo para optimizar el desarrollo de nuevos productos y afrontar con confianza los desafíos de la miniaturización, el cumplimiento normativo, la interrupción de la cadena de suministro, las pruebas y más.
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